viernes, julio 19, 2013

CONDUCTAS TEMPRANAS EN LA COMUNICACIÓN Y EL LENGUAJE


Las conductas tempranas del desarrollo de la comunicación y el lenguaje en los niños y niñas, han sido definidas por Gerardo Aguado y Carmen Gándara (2013) como predictores tempranos a identificar en el Trastorno del espectro Autista-TEA y son:

La Intersubjetividad primaria la describen como las primeras exteriorizaciones comunicativas del infante entre la que se destaca la sonrisa social, se evidencia cercana a los 2 meses. En principio, esta se presenta posiblemente como una actividad refleja pero el adulto sobre dimensiona su significado y le da una interpretación que genera que el niño la repita y aprenda a utilizarla en determinadas situaciones.

Conductas protoimperativas basadas en la selección del niño de sus sentidos con el objeto percibido manifestándose en un “yo quiero eso” sin contar para ello con el adulto (protoimperativo instrumental).
Cuando interviene el adulto como proveedor esta conducta se convierte en peticiones más elaboradas “dame eso” (protoimperativo regulador) y es la respuesta del niño la que lo coloca, aunque aún en forma constreñida, en tener en cuenta la intervención del otro.

Conductas protodeclarativas se evidencian como respuesta a la intervención del adulto al mostrar el objeto acompañado de su denominación, breve descripción y cambio de miradas. El niño aprende que su gesto demandante puede servir para otro fin como el de compartir lo que efectiviza a través de un modo comunicativo declarativo.
Hay tres expresiones que se emplean para esta etapa de desarrollo social cognitivo del niño: Conductas protodeclarativas referidas a su comportamiento; atención conjunta (de 8 a 10 meses), referidas al mecanismo cognitivo que hace posible esas conductas e intersubjetividad secundaria que representa la etapa de dicho desarrollo social y cognitivo.

Es necesario que los padres conozcan estas conductas que se evidencian dentro de un desarrollo típico del niño, para que afinen su observación, con el fin de detectar tempranamente algún déficit en el área de la comunicación y el lenguaje y brindarle al niño el apoyo necesario a tiempo.


lunes, julio 01, 2013

LA PLASTICIDAD DEL CEREBRO


La plasticidad del cerebro está presente en el proceso de desarrollo de la persona en todo su ciclo de vida. Durante este proceso, el aprendizaje es un condicionante para la adaptación del cerebro – mente a los diferentes contextos. A nivel celular, la plasticidad es una modificación de la neurona debido a las características de los potenciales de acción que se presentan en ella.



Los estudios respaldan el hecho que el desarrollo normal del cerebro depende de una interacción entre la herencia genética y la experiencia, es decir, el genoma provee la estructura general del sistema nervioso central y la actividad que realiza este sistema y la estimulación sensorial le proporcionan el ajuste para funcionar, he ahí la importancia de la intervención para lograr los cambios.



William Greenough (1996) de la Universidad de Illinois, mediante estudios descubrió que en los primeros meses de vida es donde se presenta una abundancia de sinapsis, es como si el cerebro previera que ocurrirán experiencias importantes durante el primer periodo de vida del ser y las recibe con una sobre producción de conexiones sinápticas de las cuales una parte son fortalecidas y otra parte serán selectivamente eliminadas, a los dos años se da la máxima densidad de conexiones sinápticas las que van disminuyendo poco a poco.



Para intervenir de manera que se observen cambios en los procesos de aprendizaje y de la memoria es necesario que se insista en una plasticidad a largo plazo con un cúmulo de estímulos sistematizados que permitan al sistema nervioso procesar e integrar temporalmente la información.



La sinapsis no es un proceso rígido, sino que puede variar a causa de los patrones de actividad del organismo. En muchas sinapsis, una acción repetitiva puede acarrear no sólo a una alteración a corto plazo, sino también a modificaciones que pueden con el tiempo, incluso volverse permanentes.

No está de más recordar a Jean Piaget (1896-1980) cuando afirma que el desarrollo cognitivo no es el resultado sólo de la maduración del organismo ni de la influencia del entorno sino de la interacción de los dos.

Siguiendo con Piaget, para él la inteligencia es una adaptación y biológicamente el organismo se adapta al entorno mediante la acción y “la inteligencia extiende esta creación construyendo estructuras mentales que pueden aplicarse a las del entorno” (1953:3)


Esta influencia del entorno se da a través de las experiencias, en cuanto a cómo lograr que esta intervención sea efectiva, es necesario una detección temprana y que los padres, en primer lugar y los profesores conozcan sobre los procesos naturales del desarrollo con el propósito de facilitar aquellos cambios que debemos esperar cuando un niño va creciendo, considerando que cada uno se desarrolla a su propio ritmo.

LA LECTURA Y ESCRITURA EN NIÑOS CON HABILIDADES DIFERENTES


Son incontables las definiciones que encontraremos sobre lectura; este aprendizaje como cualquier otro se logra mediante un proceso que se inicia desde los primeros años de vida.

Gastón Mialaret la define así: “saber leer es ser capaz de transformar un mensaje escrito en un mensaje sonoro, siguiendo ciertas leyes muy precisas, es comprender el contenido del mensaje escrito, es ser capaz de juzgar y apreciar el valor estético”.

Esto significa que la lectura involucra un proceso en el que se producen adquisiciones relacionadas con la decodificación, el trazo, la comprensión, interpretación, composición y la redacción.

Estos procesos implican funciones representativas, metalinguística y estéticas del lenguaje, que en el caso de algunos niños y niñas con habilidades diferentes, no las alcanzan o se encuentran alteradas.

Por lo descrito inferimos que los alumnos con discapacidad intelectual, sensorial y los niños y niñas con TEA no pueden ser buenos lectores ya que presentan dificultades en el nivel fonológico, semántico, sintáctico y pragmático del lenguaje por lo que el nivel lector que consigan dependerá de estas habilidades que en algunos casos sólo les permitirá llegar a un nivel de lectura mecánica o quizás a un nivel de lectura comprensiva y por qué no, en la iniciación del juicio del mensaje.

Sin embargo, si descubrimos indicadores que apunten al logro de este conocimiento, es importante intentarlo, porque la lectura es una capacidad que utiliza el niño para el logro de otras y para potenciar su socialización.

Es necesario tener en cuenta que esta habilidad se obtiene de modo progresivo y sistemático y la enseñanza debe ser estimulante, significativa y partiendo de prácticas de su entorno;  al respecto Condemarín y Blomsquist señalan que “la palabra impresa representa símbolos auditivos, los cuales, a su vez,  representan experiencias”

La metodología es variada desde las que parten del conocimiento de las letras aisladas para luego formar sílabas y después palabras, frases y oraciones como son los métodos sintéticos, hasta el método fonético basado en la enseñanza de las letras por su sonido. Los métodos analíticos globales parten de la lectura de palabras o frases que luego se dividen en sílabas y palabras o los eclécticos que toman los aspectos positivos de todos y cada uno. Va a depender de la evaluación que se haga al niño el decidir con cuál de ellos tendrá más éxito.