martes, octubre 29, 2013

HABILIDADES SOCIALES

No hay una definición única para el término de habilidades sociales por su compleja naturaleza.
Vicente E. Caballo (1993) las describe como un conjunto de conductas realizadas por un individuo en un contexto interpersonal que expresa sentimientos, actitudes, deseos, opiniones o derechos de un modo adecuado a la situación, respetando esas conductas en los demás, y que generalmente resuelve los problemas inmediatos de la situación.
Las habilidades sociales básicas son:
• La comunicación: capacidad de comprender y expresar sentimientos, emociones, intereses, ideas, etc.
• Asertividad: capacidad de defender sus derechos y opiniones, respetando los de otros.
• Empatía: capacidad de ponerse en el lugar del otro.
• Cooperación: capacidad de hacer suyo un objetivo e interés común.
• Apego: capacidad de construir vínculos afectivos con otras personas.
• Autocontrol: capacidad de controlar los impulsos.
• Resolución de conflictos: capacidad para intender un conflicto y sacar alternativas de solución al mismo.

Los niños y las niñas con pocas habilidades sociales tendrán problemas para la interacción en su entorno lo que se evidenciará en sus:
• Problemas de autoestima.
• Dificultad para expresar deseos y opiniones.
• Dificultades para relacionarse con los demás.
• Problemas escolares.
• Malestar emocional.

Las habilidades sociales se adquieren a través de:
• Las experiencias.
• La observación.
• La imitación
• El ensayo.
• La información.
• Reforzadores.

Las habilidades se desarrollan progresivamente a lo largo de la infancia y la adolescencia y es necesario tener en cuenta el proceso de estas capacidades que Howard Gardner (1983) describe como inteligencia inter personal e intrapersonal.

• Fomenta la autoestima de los niños y las niñas; ayúdales a formar una imagen positiva pero realista de sí mismos, evita las críticas personales.
• Transmite valores.
• Sirve de ejemplo para ellos.
• Bríndales información de las situaciones que se presentan y no comprenden.
• Estimula la capacidad de escuchar y entender a los demás.
• Refuerza las conductas adecuadas.
• Procura dotar a los niños y niñas de un ambiente rico en relaciones.
• Alienta a los niños y niñas a participar en diversas actividades con otras personas, sin que sea necesaria tu presencia.
• Acoge con tu presencia y actitud al niño o niña cuando se le presenta una situación de rechazo y explícale el porqué de esa conducta.